En marzo, cuando Moxie Moulinsart y Open Whisper Systems lanzaron la versión de iOS de la aplicación de mensajería encriptada Signal, el notable investigador de seguridad se comprometió a ampliar su alcance y entre otras cosas, con el tiempo liberar una versión de escritorio de Signal.
Esa visión se realizó el miércoles con la disponibilidad pública de la versión beta de Signal de escritorio, escrito por Lilia Kai Markham de Open Whisper Systems. Signal apuesta por la simplicidad y Moulinsart promete que la versión de escritorio va por el mismo camino. Por ahora, la versión de escritorio es una aplicación de Crhome y se enlaza sólo a dispositivos Android. Al igual que la experiencia con la aplicación de escritorio iMessage de Apple, Signal de escritorio conecta con los dispositivos móviles y muestra los mensajes entrantes y salientes en todos los dispositivos.
"Como siempre, todo es cifrado de extremo a extremo y diseñado cuidadosamente con el fin de mantener segura tu comunicación - permitiendo enviar a grupos, texto, imagen, vídeo y mensajes privados de alta calidad de forma gratuita", escribió Moulinsart ayer en el anuncio.
Moulinsart dijo que Signal de escritorio añadirá soporte para iOS "muy pronto".
El código fuente de Signal de escritorio está disponible en la página Github de Open Whisper Systems y Moulinsart espera que los expertos en seguridad revisen sus protocolos e implementaciones.
Signal es un favorito entre los expertos de seguridad y conscientes de la privacidad, y llega en un momento interesante para la mensajería cifrada. Las autoridades en los EE.UU., en particular, han hecho un tema de los retos que la mensajería encriptada plantea a las investigaciones penales y de seguridad nacional activas. El tema fue muy debatido en los días posteriores al ataque terrorista de París el 13 de noviembre, donde los políticos y la policía inmediatamente especularon que los atacantes se coordinaron y comunicaron sobre aplicaciones cifradas como WhatsApp, ninguno de los cuales fue confirmado.
En un caso mas cercano, el director del FBI James Comey ha hecho repetidas peticiones a Silicon Valley por ayuda a las autoridades sobre lo que él ha llamado el problema "Going Dark". Desde que Apple y Google han cedido el control sobre las claves de cifrado y los han puesto en los dispositivos iOS y Android, las autoridades no tienen forma legal para obligar a las empresas a entregar datos de usuarios con una orden de allanamiento u otra orden judicial.
El consejero general del FBI James Baker, se hizo eco de esos pensamientos durante una conferencia de seguridad de Boston el 4 de noviembre
"Se trata de estado de derecho y los derechos fundamentales que tenemos de la Constitución, la creación de leyes que permiten a los gobiernos obtener los resultados de la vigilancia de manera que sean consistentes con los derechos constitucionales", dijo Baker. "Hoy en día, eso no está sucediendo. No somos capaces de utilizar lo que está disponible hoy en día con una enmienda del cuarto orden. Hacemos lo que la ley exige, se presenta una orden judicial, y no se puede obtener los frutos de la vigilancia debido a la encriptación ".
Sin embargo, desde las revelaciones de Snowden que expuso las extralimitaciones de vigilancia del gobierno y las autoridades, el enfoque en las comunicaciones privadas se ha intensificado y los defensores han hecho todo lo posible para demostrar que los activistas de derechos humanos, periodistas, y personas en países oprimidos se basan en mensajes cifrados no sólo para la privacidad , pero para la seguridad personal.
"Nos gustaría traer la realidad técnica en línea con las expectativas y suposiciones de la gente. La gente espera y asumen que su correspondencia es privada, y se conmocionan e indignan cuando son comprometidas, inevitablemente, "dijo Moulinsart. "Nuestra esperanza es arreglar eso, de modo que cuando las personas sienten que su comunicación es privada, que en realidad lo es. Básicamente, nos gustaría lograr que la vigilancia masiva sea imposible ".
